domingo, marzo 01, 2009

ABRE LOS OJOS

Alejandro Amenábar, 1997

...Un edificio no cuenta como defensa fuerte al viento más que con su propio peso y su base, lo que en edificios corrientes no produce el más mínimo problema: siempre son estables.
Sin embargo, cuando aumenta la altura, el empuje total del viento no sólo es cada vez mayor, sino que se sitúa más lejos del suelo.
En edificios muy altos aparece ya como condicionante del diseño la necesidad de contar con todo o la mayor parte del peso del edificio y/o el totl de su base para evitar el vuelco.
En Azca, hay ahora en construcción edificios con las dos estrategias:
-Concentrar todo el peso en un tubo central de hormigón.
-Construir la fachada (en la que carga gran parte del peso de la construcción) como un tubo rígido, lo que puede conseguirse triangulándola como en el John Hancock Center de Chicago, o haciendo una malla rígida de vigas y soportes como en la torre de Azca.
En este caso, la unión de vigas y soportes es más crítica que la propia continuidad de la viga, por lo que construir la cruz en taller y hacer el empalme de continuidad de la viga en obra es una estrategia razonable.
De todas formas, ni el número de plantas del edificio de Yamasaki ni su esbeltez obligan, de hecho, a realizar este tipo de estructura, que se convierte en la única posible para construcciones verdaderamente altas.

Ricardo Aroca. La torre más alta. Arquitectura Viva Nº1. Junio 1988